Ramón Ávila Alonso, destinado en la sección de Intendencia de Tablada, cuenta que en la plaza ubicada a la espalda de la Dirección de Infraestructuras hay un edificio con una historia apasionante detrás. “Ahora es una sucursal bancaria pero antiguamente era uno de los edificios más importantes de Tablada”, explica Ramón. Era el Centro de Reclutamiento y Movilización nº2. En la parte de movilización se custodiaban todos los expedientes personales del personal, tanto profesional como de reclutamiento de toda la segunda región aérea, desde el inicio del Ejército del Aire. Cuando ese edificio dejó de ser centro de reclutamiento, la documentación pasó al Castillo de Villaviciosa de Odón.
Cada tres meses pasaban por esa plaza 250 reclutas, acompañados de familiares, causando una gran expectación. “Esta plaza era un hervidero de personas”, cuenta Ramón.
Lo que hoy en día es la peluquería antiguamente era un pequeño local a modo de cantina donde tomaban café los familiares del recluta y en los sótanos de la Dirección de Infraestructuras se hacía su afiliación.
“Es impresionante la historia que tiene este edificio”, cuenta Ramón. “Por aquí han pasado autoridades, toreros, futbolistas…”
Otro edificio simbólico de Tablada era el colegio Teniente General González Gallarza. En el pasado estaba al borde la carretera que unía San Juan de Aznalfarache con el aeródromo. “No existía ninguna barrera que lo separase de la barriada”, afirma Ramón. Este centro educativo, además, estaba dedicado exclusivamente a niños. Las niñas eran recogidas aquí por un autobús y las llevaban a un colegio del Convento de los Sagrados Corazones de San Juan de Aznalfarache.